La aplanadora de votos que logró la consulta electoral del PLD este octubre 16 de Abel Martínez con 209,752 votos, 60 % total, abrió varias lecturas.
Primera y principal, diluye el liderazgo del ex presidente Danilo Medina, cuya candidata Margarita Cedeño obtuvo 56,392 votos, tercera, precedida por Francisco Domínguez 71,688 votos.
Segunda, escasa votación total 295,686 votos sumados por suscrito, 357,313 sumados por Hoy, diferente a consulta 2020 donde Gonzalo Castillo obtuvo 911,324 frente a Leonel Fernández, 884,630 votos, un total PLD-FP de 1,795,954 votos, traducción evidente desencanto con la otrora nutrida militancia PLD.
Tercera, asistencia masiva votantes adultos, escasa presencia juventud, peligroso litoral votantes ahora, desorientada, sin certeza escogencia certamen 2024, demostrada interrogante muchos dirigentes evadían captarse paparazzis.
Evidencia impacto incuestionable denuncias corrupción como nunca antes estilizada cúpula PLD, empezando Leonel Fernández, culminando Danilo Medina.
En nuestro trabajo a este diario día 14, precisé triunfo Abel Martínez, considerando único demostraba foja trabajo público valorado por santiaguenses en su función de alcalde de la segunda ciudad más importante del país en economía, política e historia, desde siempre, diferente a contendores, simples bulteros, sin raigambre ni luces entre militancia PLD.
Concluido el certamen valorativo quien fue preferido por votantes, ahora resulta, de repente, Abel Martínez es el nuevo líder del PLD, y representa una nueva opción, una figura diferente a los mastodontes del cuestionable sanedrín de 36 engreídos y arrogantes copetudos que entendieron, por dentro, que eran los inconclusos árbitros del país, aunque una porción intra partido, descreída y abominaba esa falsa pretensión, y por fuera, palmario rechazo absoluto.
Prueba de ese compacto nutrido rechazo al sanedrín evidenció el triunfo de Abel, suerte de una crónica anunciada por muchos, a la chita callando, que abre nueva expectativa electoral al PLD, al PRM y al país de frente a mayo 2024.
El esperado triunfo electoral de Abel no fue el resultado de compras de conciencia, conforme fue el estilo de gobernar del PLD Leonel-Danilo, perversa estrategia dominar el universo clientelar con miras galvanizar en el poder 40 años PLD.
El triunfo electoral de Abel tradujo un reconocimiento a su desempeño en la alcaldía santiaguense eliminando buhoneros saturaban principales vías Ciudad Corazón, haitianos incluidos ocupaban emblemático parque Duarte, una impronta que resulta un reto al presidente Luis Abinader en materia de deshaitianizar el país, que el gobernante no ha afrontado, conforme sentir nacional e Instituto Duartiano.
Ese resquicio podría resultar un superlativo tema de campaña, donde Abel marca incuestionable impronta.
Ahora, el rol de Abel consiste en contemplar con serenidad, cordura, visión, templanza, su mediático futuro político, frente al evento cívico mayo 2024, sin envanecerse, porque de caer en el tramayo de una utopía megalómana, su futuro político se desvanecerá y quebrará, como lance entre vidrio y piedra.
Margarita se reúne con su equipo y l
