Sergio Vargas explica por qué figura en expediente sobre caso Medusa
Explicó que ocupaba bienes que habían sido incautados por la Procuraduría General de la República, entre ellos un local comercial y un apartamento en esta capital, porque desde hace cuatro años tiene un acuerdo con esa institución, a la que ofrece servicios de conciertos en recintos carcelarios a cambio de la asignación de un bien inmueble en calidad de custodia.
“Para estos conciertos, la Procuraduría solo da el permiso y la autorización en cuál recinto se va a realizar, y yo lo pongo todo. Si tuvieran que pagar tendría que pagar 500 mil pesos por cada presentación”, indicó.
Dijo que, hasta el momento, solo ha ofrecido cinco conciertos antes de la pandemia y uno después, lo que equivale a un costo de tres millones de pesos.
“Estas presentaciones a los privados de libertad, no solo las realizo en el país, también he cantado en las cárceles de Panamá y Colombia. Me he propuesto hacer estas actividades como una especie de ofrenda que me asigné en la vida”, dijo.
Sobre el local comercial, explicó que durante las visitas a los recintos encontró jóvenes con talentos artísticos y con deseos de desarrollar sus proyectos musicales, por lo que se propuso ayudarles cuando ya estuvieran en libertad, con la grabación de temas musicales.
Reveló que el local comercial es la suite 14-A de la Plaza Fernández, ubicada en la avenida Winston Churchill.
Explicó que el proyecto no prosperó debido a la llegada de la pandemia.